A 40 años del Huracán de Menotti

(De Cba24n) Huracán alcanzó su único título en el profesio-
nalismo al obtener el campeonato Metropolitano de 1973 bajo la conducción de César Luis Menotti, hecho del que hoy se cumplen 40 años y que dos años después empezó a cambiar la historia del seleccionado nacional.
Es que a partir de 1975 se decidió priorizar a la selección argentina por encima de cualquier interés partidario y fue Menotti el elegido para impregnarle ese estilo de fútbol "que le gustaba a la gente" al representativo nacional, lo que dio sus frutos tres años después con la obtención del Mundial de 1978.
Roganti; Chabay, Buglione, Basile y Carrascosa; Brindisi, Russo y Babington; Houseman, Avallay y Larrosa (foto). Con esa formación base el "Globo" se paseó muy orondo por la primera rueda del campeonato, y cuando quedó mutilado por las convocatorias al seleccionado que se preparaba para Alemania 74, "pasó a defenderse sin perder estilo".
La frase pertenece a Jorge Carrascosa, el lateral izquierdo de aquel equipo al que Menotti hizo capitán del seleccionado argentino y abandonó al equipo albiceleste un par de meses antes del Mundial 1978 "porque quería cambiar las cosas desde adentro. Por eso mi renuncia fue de la mano con mi forma de pensar", adujo.
Huracán se consagró campeón el 16 de septiembre de 1973, dos fechas antes de finalizar el campeonato, pese a perder 2 a 1 como local ante Gimnasia y Esgrima La Plata, porque su inmediato perseguidor, Boca Juniors, cayó por el mismo marcador ante Vélez Sarsfield en Liniers y ya no lo podía alcanzar.
"En aquel momento no se daban tres puntos por triunfo sino dos y los campeonatos eran largos. Yo estuve en los 32 partidos de ese certamen y lo más valioso de aquel equipo fue poder plasmar en el juego un ideal de ganar y gustar", destacó Carrascosa en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.
"Me emociona hablar de todo aquello 40 años después, pero que se lo recuerde después de tanto, aumenta la valoración sobre lo conseguido, algo que yo también empecé a advertir con el transcurrir del tiempo", confesó.
El "Lobo" debutó en la primera de Banfield a los 18 años y antes de llegar a Huracán fue campeón con Rosario Central. Se retiró a los 31 años y hoy, a los 65 años, mientras sigue despuntando el vicio en ligas barriales y se dedica a los seguros de automotores, reniega de la "búsqueda de resultados en desmedro de la belleza".
"Hoy este deportes es de máxima complejidad, como la vida misma. Por eso también hay que destacar a aquel equipo de Huracán, ya que llevar a la práctica una idea en un grupo tan heterogéneo como lo es un equipo de fútbol, es algo muy difícil de lograr", argumentó.
"Y para alcanzar eso no solamente hacían falta jugadores de la calidad de los que teníamos, sino fundamentalmente una conducción como la de Menotti para llevar esa idea a la práctica", remarcó.
Aquel Huracán capitaneado por Miguel Angel Brindisi dejó una huella imborrable en el propio club de Parque de los Patricios por ser el único en dar una vuelta olímpica en primera, pero fundamentalmente porque su ideario futbolístico era tan generoso que terminó trascendiendo hasta al propio seleccionado nacional, para que floreciera la historia grande del fútbol argentino.